Pero la OTAN ha enviado una flotilla al Mar Negro

Rusia quiere restablecer sus relaciones con EE. UU.

Dos no riñen si uno (Rusia) no quiere, dice el saber popular. Ya, pero si la situación está muy tensa y el otro sí quiere reñir, igual se equivoca el saber popular… En cualquier caso, al tiempo que se mantiene firme, Rusia intenta apaciguar la situación. Mientras tanto sigue navegando en aguas del Mar Negro una flotilla de la OTAN. De muy poca envergadura, parece: podría ser destruida en veinte minutos.

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ÁNGEL MAESTRO

Aunque curiosamente la prensa española no se ha hecho eco del asunto, el presidente ruso Dimitri Medvédev manifestó el 4 de septiembre su disposición a restablecer plenamente sus relaciones con Estados Unidos, pese al deterioro existente entre Moscú y Washington a causa del conflicto en Georgia.
Según Medvédev esta tensión es consecuencia de la política que Estados Unidos ha aplicado respecto a Georgia. Da la impresión de que el presidente georgiano, Mijail Saakashvili recibió de Washington carta blanca para actuar según le pareciera, con las consecuencias que a la vista están.
Medvédev señaló que en los Estados Unidos existe cierto resentimiento debido al fracaso del proyecto denominado “Georgia libre”, habiéndose producido la quiebra del dirigente georgiano, una profunda crisis de su régimen y manteniéndose una muy tensa situación.
Entre las reacciones más fuertes producidas en Washington ante la intervención rusa en el Cáucaso, la más significativa ha sido la del Secretario de Defensa, Robert Gates (antiguo director de la CIA), el cual ha advertido de que las relaciones bilaterales entre ambos países se verían deterioradas durante mucho tiempo a menos que Rusia diera marcha atrás.
Existe en Rusia un evidente malestar por la presencia en el Mar Negro de una flotilla de la OTAN compuesta por tres buques norteamericanos y tres fragatas enviadas por España, Polonia, Alemania, junto con cuatro barcos turcos, en lo que se considera una actitud de advertencia de la OTAN. Se trata de un grupo de combate heterogéneo, según señalan expertos en temas navales, ya que la mayoría de estos barcos, entre los que figura incluso un guardacostas, no son de suficiente nivel, si se exceptúa la modernísima fragata española, dotada de la última tecnología en misiles.
El almirante Eduard Baltin, ex comandante de la Flota rusa del Mar Negro, ha manifestado que la Marina Guerra rusa tardaría unos veinte minutos en barrer a la flotilla de la OTAN.
Según dicho almirante, el Mar Negro constituye una auténtica ratonera de la que resulta muy difícil salir, de forma que los eventuales buques enemigos podrían ser atacados no sólo con toda la potencia de fuego del crucero Moskva y de otros buques de la Armada rusa, sino también desde tierra firme y desde el aire. El almirante ruso también ha destacado las grandes carencias militares de la flotilla de la OTAN, aunque ha insistido en descartar un enfrentamiento, ya que “Rusia no va a atacar la primera y ellos no parecen suicidas”.
Por otra parte, el primer ministro Vladimir Putin ha reiterado sus declaraciones encaminadas a eliminar todo histerismo en relación con la presencia de la flotilla de la OTAN en el Mar Negro.

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