Da gusto, esta gente sin complejos

Francia honra a sus caídos en la descolonización del Magreb

Argelia, Marruecos, Túnez… La descolonización francesa del Magreb fue cualquier cosa menos un paseo militar. Muchos franceses cayeron entre 1952 y 1962. La memoria de los años siguientes los sepultó en el oprobio, como a quien ha luchado en “el lado equivocado”, aunque defendieron a su país. Ahora la localidad de Melun va a inaugurar un memorial dedicado a los 204 jóvenes de la vecindad que murieron allá. No es el primer monumento de este género, pero sí es la primera vez que se hace tal cosa en la problemática periferia de París, hoy abarrotada de población musulmana.

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El monumento se inaugurará el próximo 23 de junio. La idea se le ocurrió al presidente del departamento Seine-et-Marne de la Federación Nacional de ex combatientes de Argelia, Marruecos y Túnez, Jean-Calude Potier. Un total de 204 jóvenes de ese departamento cayeron en combate en las guerras de la descolonización, en particular en Argelia. Todas las demás asociaciones de ex combatientes –porque hay varias- se sumaron rápidamente al homenaje. Después, el municipio cedió un pequeño terreno. Con todo eso en el bolsillo, el proyecto recibió finalmente la bendición del Ministerio de Defensa francés. El “Memorial” costará unos 100.000 €. El dinero no ha salido sólo de Defensa, sino también de asociaciones civiles, particulares e instituciones locales. 

Con este de Melun ya serán sesenta y tres los memoriales erigidos en distintos puntos de Francia a los caídos durante aquellas guerras, y este será el primero que se eleva en la periferia de París. Llamativamente, la ola conmemorativa se ciñe a los últimos diez años: antes, la memoria de la descolonización, y en especial la de Argelia, formaba parte de los tabúes de la vida pública francesa. La opinión dominante consideraba que los franceses habían sido los “malos” de aquella historia, los opresores, frente a unos pueblos que luchaban por su libertad. La historia real, sin embargo, no es tan simple.

Hemos de situarnos en 1954. Francia controla Marruecos, Túnez y Argelia. En todas partes las fuerzas independentistas emplearon tácticas terroristas. Marruecos y Túnez, que eran protectorados franceses, conseguirán su independencia en 1956; la descolonización era un imperativo de los tiempos. Pero Argelia no era un protectorado: Argelia formaba parte del territorio metropolitano francés. 

En la Argelia francesa vivían nueve millones de argelinos y un millón de franceses. Los independentistas del FLN recurrieron a métodos de lucha terrorista para conquistar su independencia, asesinando a civiles franceses de manera indiscriminada. París reaccionó aumentando la presencia militar hasta medio millón de soldados y ejecutando una represión brutal. Francia controló militarmente la situación, pero perdió la partida en términos políticos: Argelia terminó proclamándose independiente en 1962 tras el referéndum concedido por el general De Gaulle. Detrás quedaba una auténtica sangría: unos 300.000 argelinos muertos –cifras de la ONU-, 6.000 colonos franceses asesinados, 24.000 soldados franceses caídos en combate y un millón de europeos exiliados de Argelia.

La inauguración del Memorial de Melun irá acompañada por una exposición sobre la presencia francesa en Argelia y un coloquio anunciado para el 19 de junio, todo ello en dependencias municipales. El adjunto al alcalde Melun para asuntos de Cultura y Patrimonio, que se llama Charles Goldstein, ha proporcionado una interpretación bastante políticamente correcta de esta iniciativa: “Se trata de rendir homenaje a unos jóvenes reclutas que se vieron envueltos en una historia que les sobrepasaba”.

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