Apadrina a un enchufado del PNV

Se avecina para miles de afiliados del Partido Nacionalista Vasco una bien triste situación. Dentro de poco, cuando entre en funciones el nuevo gobierno regional (¿"regional" ha dicho usted?) formado por el Partido Socialista con el apoyo de los "populares", deberán tales afiliados abandonar los cargos y prebendas ocupados desde hace cerca de treinta años. Ante ello está circulando por la Red un encarecido llamamiento a la solidaridad. Al transcribirlo para nuestro lectores no dudamos de que éstos sabrán ser generosos y solidarios con tan buenos españoles.

Un inesperado golpe institucional amenaza con dejar a miles de militantes del PNV en la marginación, sin coche oficial, sin despacho y sin VISA.

¿Qué será, por ejemplo, de Monseñor José María Setién?, ¿de Javi Madrazo?, ¿de Joseba Azkarraga?, ¿del propio Ibarretxe? ¡¡Hemos de ayudarles!! Después de casi treinta años “engordando michelines” no están acostumbrados al ejercicio físico, ni al frío, ni a la humillación de los refugiados. ¡No pretenderás que aguanten, como desempleados, varias horas haciendo cola en el INEM!

¿Os imagináis a Setién como capellán en un convento de monjas en Palencia? ¿O al comunista Madrazo teniendo que ponerse corbata para trabajar en un banco? Algunos de ellos volverán a pisar las aceras solos, sin estar rodeados de asesores ni pelotas, y además tendrán que pasar junto a edificios con banderas español. ¿Comprendes su sufrimiento? ¡Ponte en su lugar!

APADRINA A UN ENCHUFADO DEL PNV.

Aunque seas maketo. A él no le importará.

Deposita tu donativo en las huchas dispuestas en los batzokis o en la Sabin Etxea. (Hay batzokis en varios puntos de España, como Madrid y Benidorm.)

¡Une tu nombre al de otros amigos de los vascos, como Miguel Herrero de Miñón, Francesco Cossiga y María Antonia Iglesias!

A cuantos colaboren con su generoso donativo a esta campaña se les agradecerá su solidaridad obsequiándoles con un calendario de emakumes o de morroskos del PNV, a elegir. A los niños se les ofrecerá el cuento El Señor de las Boinas.

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