Terremoto: Rusia y China abandonan oficialmente el petrodólar

Moscú pretende, con el apoyo de China, acabar con el instrumento de dominación del poder norteamericano. Esta auténtica declaración de guerra es más peligrosa que cualquier acción militar.

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Después de que Vladimir Putin anunciara el 14 de agosto que Rusia quería en lo sucesivo vender su gas en la moneda local y no en dólares, no se ha tenido que esperar mucho tiempo para que Moscú estableciera en tal sentido un acuerdo global con China.
Según RIA Novosti , que cita a la revista Kommersant, el gobierno ruso ya ha enviado dos barcos a Europa cargados con 80.000 toneladas de petróleo de Novoportovskoye un campo de extracción en el Ártico. Ambas entregas serán pagadas en rublos y no en dólares, algo hasta ahora nunca visto.
A través del oleoducto Siberia Oriental-Océano Pacífico, Rusia también suministrará petróleo a China, el cual será pagado en yuanes chinos.
Según Kommersant, se trata de una medida de «protección» frente a las sanciones impuestas por EE. UU. contra Rusia.
Parece, pues, que el único resultado tangible de la política de sanciones contra Rusia es el de haber engendrado un verdadero cataclismo para la hegemonía del dólar en las transacciones internacionales, al tiempo que se impugna por fin su papel como moneda de reserva mundial. Una hegemonía nunca cuestionada desde 1945.
A partir de ahora, China y Rusia —respectivamente el primer y el segundo principal productor mundial de petróleo y gas— van a realizar sus transacciones en sus respectivas monedas, algo que redefine por completo el orden político y económico internacional.
Este ataque estructural contra la moneda norteamericana va a obligar necesariamente a los importadores europeos de gas y de petróleo ruso a pagar a Moscú en rublos.
De tal forma, Moscú pretende, con el apoyo de China, acabar con el instrumento de dominación del poder norteamericano, socavándolo en su base. No cabe duda de que esta auténtica declaración de guerra es más peligrosa que cualquier acción militar.

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