Lo que va de 1965 a 2017

¿En qué año nos volvimos tan gilipollas?

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Escenario 1: Juan no se queda quieto en clase. Interrumpe y molesta a los compañeros.

Año 1965: Va a la dirección, se queda de pie 1 hora, sale el director, dos "capones" y vuelve tranquilo a clase.

Año 2017: Lo derivan al Departamento de Psiquiatría, lo diagnostican como hiperactivo, trastornos de ansiedad y déficit en atención ADD, el psiquiatra le receta Rivotril. Se transforma en un zombi. Los padres tramitan una subvención por tener un hijo discapacitado.

 

Escenario 2: Luis rompe el cristal de un coche en el barrio.

Año 1965: Su padre le suelta dos "leches". A Luis ni se le pasa por la cabeza hacer otra nueva "cagada", crece normalmente, va a la universidad y se convierte en un profesional exitoso

Año 2017: Arrestan al padre de Luis por maltrato. Lo condenan a 5 años de cárcel y por 15 años debe abstenerse de ver a su hijo  Sin la guía de una figura paterna, Luis se vuelca a la droga, delinque y queda preso en una cárcel especial para adolescentes.

 

Escenario 3: José se cae mientras corría una carrera en el patio del colegio, se raspa la rodilla. Su maestra, María, lo encuentra llorando y lo abraza para reconfortarlo...

Año 1965: Al poco rato, Juan se siente mejor y sigue jugando.

Año 2017: María es acusada de abuso sexual, se enfrenta a tres años de cárcel. José se pasa cinco años de terapia en terapia. Sus padres demandan al colegio por negligencia y a la maestra por daños psicológicos y ganan ambos juicios. María renuncia a la docencia, entra en severa depresión y se suicida.

 

Escenario 4: Disciplina escolar.

Año 1965: Hacías el payaso en clase. El profesor te metía dos buenos sopapos. Al llegar a casa tu padre te propinaba otros dos.

Año 2017: Haces el payaso. El profesor te pide disculpas por reprenderte y se queda con culpa por hacerlo. Tu padre va al colegio a quejarse y denunciar al docente y para consolarte te compra una moto.

 

Escenario 5: 31 de octubre.

Año 1965: Llega el día del cambio de horario de invierno al horario de verano. No pasa nada.

Año 2017: Llega el día del cambio de horario de invierno al horario de verano. La gente sufre trastornos del sueño, depresión, falta de apetito, caspa y celulitis.

 

Escenario 6: El fin de las vacaciones.

Año 1965: Después de comerse una caravana interminable con toda la familia metida en un Seat 600, tras 15 días hacinados en la costa, se terminan las vacaciones. Al día siguiente se trabaja y no pasa nada.

Año 2017: Después de volver de Punta Cana, en un viaje "todo incluido", se terminan las vacaciones y la gente sufre del síndrome del abandono, ataques de pánico y seborrea....

 

LA PREGUNTA ES: ¿EN QUE AÑO NOS VOLVIMOS TAN GILIPOLLAS?

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